Inseminación artificial: 10 razones a tener en cuenta

Al igual que el resto de técnicas de reproducción asistida, la inseminación artificial tiene ventajas y desventajas. A favor, básicamente, que se trata de una técnica sencilla e indolora, muy poco invasiva para la madre. En  contra, que tiene unas tasas de éxito de embarazo muy bajas ya que para que para conseguirlo los progenitores deben cumplir algunos requisitos.

 

¿Qué es la inseminación artificial?

La inseminación artificial consiste en colocar una muestra de semen, previamente preparada en el laboratorio, en el interior del útero de la mujer para aumentar las posibilidades de fecundación acortando la distancia entre espermatozoide y óvulo.

¿Cuál es el proceso?

A diferencia de la fecundación in vitro, en la inseminación artificial los óvulos no han de ser extraídos, aunque sí se somete a la mujer a un proceso de estimulación ovárica y de preparación del endometrio para favorecer la anidación. También es necesario realizar, en el laboratorio, una selección y concentración de los espermatozoides con mejor movilidad a través de un seminograma, y eliminar aquellos muertos, inmóviles o lentos.

Respecto al proceso de inseminación artificial, es rápido y no requiere sedación ni paso por el quirófano; teniendo que realizarse durante los días fértiles de la mujer en una clínica o centro especializado.

Una vez el semen está preparado, se coloca a la mujer un espéculo (las molestias son similares a la de una citología normal) y se pasa a través del cuello uterino una cánula para  introducir la muestra con el esperma en el interior del útero. Después, la madre descansa después de unos minutos antes de volver a casa.

Durante los siguientes 15 días se recomienda a la mujer reposo relativo haciendo una vida normal aunque evitando deportes o actividades de alta intensidad. Pasado este tiempo volverá a la consulta para comprobar si el embarazo ha sido un éxito.

10 ventajas e inconvenientes de la reproducción asistida

A favor de esta técnica podemos resaltar:

  • Se trata del método más parecido a la concepción natural.
  • Es sencilla e indolora, y la seguridad de la mujer está garantizada en todo momento.
  • Es la técnica de reproducción asistida más barata. Apenas requiere la intervención de personal y no es necesario ni el cultivo de embriones ni complejos sistemas de mantenimiento y manipulación.
  • La estimulación ovárica es relativamente leve. Además, la selección y capacitación previa del semen aumenta las posibilidades de concepción frente a, por ejemplo, el coito programado.
  • En la inseminación artificial puede utilizarse tanto con semen de la pareja masculina como con semen de donante. Esto permite que sea una técnica apta para parejas de mujeres, mujeres que quieren ser madres en solitario o parejas en las que se ha detectado únicamente infertilidad masculina.

Respecto a los aspectos “negativos” de la inseminación artificial, destacamos:

  • No puede realizarse en todos los casos. Hay perfiles de pacientes que por cuestión de edad, condiciones ginecológicas o anomalías en el esperma no pueden someterse a esta técnica y deben apostar directamente por una Fecundación In Vitro.
  • Para poder realizar una inseminación artificial al menos una de las Trompas de Falopio de la mujer debe ser permeable y funcional. También es necesario que ésta no tenga problemas con la función ovárica o el ciclo menstrual. La ovulación debe producirse de forma natural y espontánea aunque se refuerce con un tratamiento.
  • Lo mismo ocurre con la calidad del semen: debe ser alta. Si no es así o existen problemas de fertilidad masculina graves se deberá acudir a otra técnica o al uso de semen de un donante. De ser así se seleccionará el más adecuado para cada caso.
  • La tasa de éxito de la inseminación artificial es baja, apenas de un 15 % por ciclo. Esto implica que, por norma general, una pareja debe realizar diferentes intentos para conseguir un embarazo. En el caso de utilizar semen de donante la tasa de éxito se sitúa alrededor del 25%.
  • Si la inseminación artificial falla al tercer intento se recomendará a la pareja someterse a una Fecundación In Vitro, una técnica con posibilidades de éxito más altas. Por eso muchas parejas deciden elegir directamente la segunda opción.

¿Para quiénes está recomendada la inseminación artificial?

Con las ventajas e inconvenientes que has podido apreciar, se forma un perfil genérico de los pacientes que podrían ser tratados mediante esta técnica de reproducción asistida. Pese a no ser uno de los tratamientos de fertilidad efectivos, descubre para quiénes está recomendada la inseminación artificial.

  • Parejas jóvenes con problemas de infertilidad de origen desconocido.
  • Parejas en las que la mujer tiene problemas en el ciclo ovulatorio, alteraciones en la ovulación o endometriosis leve.
  • Cuando la mujer presenta alguna alteración en el cuello uterino, alteraciones del moco cervical o vaginismo.
  • Cuando el varón presenta defectos leves o moderados en el semen a nivel de concentración o movilidad de los espermatozoides.
  • Parejas de mujeres.
  • Mujeres sin pareja.
  • En casos de existir riesgo de transmisión de enfermedades hereditarias no detectables con diagnóstico preimplantacional.
  • Parejas con enfermedad de transmisión sexual que no permite que se realice un “lavado” del semen satisfactorio  previo a la inseminación.
  • En casos de preservación de la fertilidad masculina ante un tratamiento oncológico. El semen puede congelarse y después realizar una inseminación artificial.

Ahora ya sabes en qué ocasiones recurrir a la inseminación artificial y en qué consiste esta técnica de reproducción asistida. Si te encuentras ante una situación de dificultades para quedarte embarazada, deberás valoras si recurrir a esta técnica.

Tips para quedarte embarazada